The Selfish Gene
Richard DawkinsA gene-centered view of evolution
A gene-centered view of evolution
El libro fue publicado en 1976. Yo lo leí bastante más tarde, probablemente a finales de los ochenta. Ya conocía a R. Dawkins por algunas intervenciones en debates sobre religión. Es uno de los ateos militantes más inteligentes que existen y tiene charlas memorables sobre el tema. Pero no fue hasta leer este libro cuando me cautivó su manera original y extremadamente inteligente de abordar problemas científicos. Desde que lo leí, me veo como un sistema complejo fabricado a lo largo de millones de años por mis genes para favorecer su replicación. En mi caso, con poco éxito…
Dawkins comienza el tema tratando de explicar el altruismo: el hecho de que exista en todas las especies un comportamiento que, aparentemente, va contra la supervivencia del individuo. Héroes que se sacrifican en una guerra, madres que mueren por sus hijos y otros muchos casos en otras especies. La explicación más aceptada y fácil de entender a primera vista es que sería una especie de selección natural del grupo, la tribu, la familia: que este comportamiento, aunque malo para el individuo, beneficia al grupo. Dawkins destroza esa explicación y ofrece otra que explica mucho más: la selección natural selecciona aquellos genes (replicados en miles de individuos) que son capaces de transmitirse con más éxito hacia el futuro. A esos genes “les da igual” un individuo (replicator) en particular. Ellos han ido forzando una evolución de sistemas complejos que, poco a poco, han sido instrumentales para que el gen se reproduzca. Y a veces esos “replicators” necesitan sacrificarse para que el gen pueda transmitirse con más èxito.
Dawkins nos lleva de la mano en una historia de todo el proceso evolutivo y vamos viendo cómo esos genes son cada vez más sofisticados para poder reproducirse mejor que otros. Se construyen membranas, se juntan en células, crean sistemas multicelulares para reproducirse mejor en ciertos entornos. Se construyen sistemas complejos erplicadores que les permiten tener mejores prospectivas de reproducción. Los “replicators”, Al final, uno se ve como un mero “replicator” de estos genes egoístas, o inmortales.
Cabe resaltar que, en 2017, la Royal Society señaló este libro como el libro de ciencia más influyente de toda la historia, desbancando a Darwin y a Newton. E igualmente que en el libro inventa e introduce la palabra y el concepto de Meme: una entidad mental que como el gen se va reproduciendo por si solo de individuo en individuo. No sabía él el exito que esa palabra iba a tener en el futuro. Un verdadero “meme”.
Después de este libro, en el que finalmente entendí bien la evolución, leí muchos otros de Dawkins. Recomiendo, por su belleza de estilo y su contenido enciclopédico, “The Ancestor’s Tale”. Una peregrinación hasta los comienzos de la vida. Empieza en Homo sapiens y va yendo hacia atrás, encontrándose con otras especies que tienen el mismo ancestro. Allí cuenta cada uno sus aventuras y continúan juntos hacia atrás para encontrar otros ancestros comunes. Hasta el origen de la vida. Es una manera prodigiosamente inteligente de presentar la evolución al revés, para entender que, tarde o temprano, en este viaje hacia atrás nos encontraremos con todos los seres vivos de la Tierra. Merece la pena su lectura.
Este libro también me llevó a leer más sobre los genes, para entender mejor a esos egoístas que nos gobiernan. Quizás destacaría obras de Matt Ridley como “The Red Queen” o “The Agile Gene”, que son más de divulgación; y otros como Power, Sex, Suicide, de Nick Lane, un libro muy interesante sobre el papel de las mitocondrias en la evolución, pero con un título que llevó a la confusión a más de un lector que buscaba otra cosa…